En una época donde se cuenta con software que permite gestionar las fórmulas médicas, es increíble que se esfuercen en este lugar por hacer algo tan sencillo de forma tan arcaica como: primero recibir la fórmula del médico escrita a mano para que luego se transcrita por otra persona en un computador para que la imprima (solo atiende 30 personas en el día), este proceso tan absurdo solo logra jugar con el tiempo de las personas.
Excelente atención al público y prestacion de servicios de salud