Pésima Experiencia en el Vivero, fuimos junto a mi esposo a comprar unas plántulas, nos bajamos con que ilusión porque estabamos adecuando nuestra finca, y plop...la señora que regaba las plantas del viviero en un tono altivo, nos manifestó que si ibamos a comprar nos abría, si no, no, porque ella estaba muy ocupada. Es increíble que las personas no comprendan que un cliente no te va a pedir nada regalado. Ahora, por eso es que lo paisas nos llevan años luz, ellos solo con su buena atención enamoran al cliente. No recomiendo para nada ese lugar. Pésima Experiencia.
Excelente servicio.