El lugar no es muy grande y es poco concurrido. Buenos espacios de parqueo de buses y vehículos particulares. Las instalaciones son buenas, cuidadas y aseadas. Lastimosamente no tiene buena señalización o indicaciones en la entrada, que permiten que los visitantes de Tuluá y en especial de otros lugares, pierdan fácilmente el acceso y deban continuar por la doble calzada sin oportunidad de devolverse (hacer el retorno) rápidamente. Con sólo una visita conocí cuatro casos de personas víctimas de esta situación.
Es un lugar muy tranquilo , cuenta con una capilla muy linda en la cual se realizan eucaristías todos los domingos, cuentan con servicio de transporte para asistir a las misas, hacen recorrido en cada sala de velacion de la empresa, muy buen servicio, es un lugar grande, también cuenta con el servicio funebre de mascotas.
Un lugar muy tranquilo.
Campo de paz