Conocimos el Yermo Camandulense cuando estaba ubicado en Envigado Antioquia..Allí dimos pasos hacia el interior, el silencio, la oración y la paz interior..Gratitud inmensa para el Padre Rafael: en su tiempo llegó a ser el único heremita (en todo el planeta) autorizado por el Vaticano para tener clausura completa..Gratitud inmensa para el padre Marino. Conocimos los Laudes y los maitines..Estar en silencio durante varios días, con comida deliciosa y frugal, con la compañía del bosque de pinos, y sobre todo con la apertura del Espíritu, El Señor, la Fuente de todo y el Amor eterno..Un paso hacia el interior, hacia el descubrimiento del llamado interno, a la vocación por la consciencia y al deseo de servir a la verdad interior que sin afán y sin cansancio espera en las profundidades íntimas de cada persona..Allí decidí que mi camino estaba en el campo psíquico, en el descubrimiento mental y en la sanación emocional..Aquí di pasos a la realización de nuestra misión con la Autonomía Vital: facilitar la manifestación auténtica de las personas que se sienten llamadas a ser ellas mismas..Amamos y Agradecemos al Yermo Camandulense la manera como enriqueció nuestra vida..Este lugar es una bendición viviente en nuestro querido planeta.
Excelente lugar para hacer retiro espiritual