Una de las cualidades del lugar es su ubicación, lo cuál hace inevitable que, al menos por curiosidad, queramos conocerla. El personal es muy amable. La disposición de la zona de las mesas, al ser abierta (en las circunstancias actuales), la hace muy agradable y motivante para disfrutar los productos en el propio sitio y no solo considerarlos para probarlos en casa. Uno de las agradables sorpresas es el café. No es lo usual que en un lugar no planteado para el barismo puro se pueda disfrutar de un buen café, en especial si hablamos del espresso. No hemos podido conocer aún todas las opciones de panadería, pero ofrecen productos novedosos, sumados a los clásicos...lo que hemos disfrutado hasta el momento ha sido muy rico. Una buena opción en el sector para darse un pequeño pecado y gusto....
Es la segunda vez que llegó hasta la artesa panadería muy bien, la atención excelente, hoy almorze bandeja paisa ummmmm deliciosa👍
Tienen domicilio... gracias