Un lugar agradable con detalles cuidadosos para que pacientes y acompañantes se sientan cómodos y tranquilos (una pequeña biblioteca, juguetes, un trampolín, la casita del mismísimo ratón Pérez, gafas locas durante la atención). Mi nena estuvo muy confiada en sus procedimientos, pues recibió un trato profesional y cálido. La doctora resuelve dudas con amabilidad e involucra a la familia en el cuidado de la salud oral de sus pacientes. Seis meses después mi hija de 5 años quiere volver!
Odontopediatra de excelente calidad y la atención es espectacular. Super recomendado. 👌