Yo vi el nombre de este lugar mientras caminaba por la avenida buscando un bar típico de Pasto y no me resistí a subir esas escaleras que me llevaron a mi hermoso país dentro de la ciudad mas bonita de Nariño!! Los mejores hervidos los bebí ahí (que fácil me tomé unos seis, por el frío, claro). Y si no me equivoco, uno de los propietarios es el que atiende y su atención es impecable, el es muy amable y rápido para sacar los pedidos. El lugar está limpio desde las copas, mesas y sillas, hasta los baños pero, lo que no puedo dejar atrás es la música. Eso hace que esta cafetería cultural se lleve todos mis aplausos!!
Excelente lugar para compartir con tus amigos