La atención es muy mala. En la tienda del Tesoro se limitan a hablar entre ellas e ignoran al cliente y si responden solo salen monosílabos.
Los productos que aquí venden son de paupérrima calidad. El juego de cubiertos de supuesto acero inoxidable, se oxidaron y la tienda se niega a cambiarlos por la falta de la caja. Las vajillas son desiguales. El servicio al cliente es insultante
Excelente atención, son muy rápidos, la comida es exquisita, el ambiente es muy acogedor.
Niceeee