Un lugar muy acogedor con muy buena música, un café de altura excelente y la atención personalizada de sus dueños es digna de destacar. También cenamos unas especialidades italianas y alemanas riquísimas, mi plato fue de unas Arancinis, que es una típica albóndiga de arroz de Italia y unas Lumpias asiáticas muy sabrosas, que son unos Rolls rellenos de verduras y pollo al horno espectaculares, todos los platos vienen acompañados con dips de salsitas y platanitos. Muy recomendable!!