No recomiendo en lo absoluto esta empresa. La señora que atiende, de nombre Lucía, le importa un pepino los clientes. Pensaba pagar una cuantiosa suma por el arreglo de una silla gamer y la señora me dejaba siempre “en visto”. ¿De cuándo acá un cliente debe andar detrás del vendedor? ¡Ni que fuera gratis! Supongo que tienen mucha plata para echar a la basura a los clientes, pero pues el mundo da muchas vueltas. Humildad, señores, humildad.
Las imágenes de los productos son copiadas de internet, respuesta dada por el vender, cuando se cotiza por internet dan un precio que no sostiene al momento de la compra, publicidad falsa
Excelente calidad de muebles y la atención de la señora Celmira es excelente
Excelente