Esta capilla tuvo sus puertas abiertas permanentemente, para la adoración del Santísimo Sacramento del Altar, durante los meses más duros de la pandemia. En el ambiente, las misas y las imágenes de Jesús, Maria y todos los santos, hacen del lugar el lugar ideal para un encuentro espiritual con Dios. Fuê el refugio espiritual ideal para mì, cuando tuve que quedarme en Colombia, por causas personales y de la pandemia.
En diciembre ponen un espectacular pesebre que se mueve cuando se insertan monedas en una urna.