Con todo respeto por las personas que profesan un culto religioso diferente al catolicismo, pero cada vez que se reúnen es para hacer escándalo, incomodan a los residentes, los Sábados y Domingos es una tortura, la paz y tranquilidad se acaba después de las 8:00 am yo aprendí que orar se hace en silencio y no con baterías, guitarras eléctricas y micrófono. Hagan sus alabanzas y predicas en silencio. Denles agradece un montón.
Muy buen lugar !
Un lugar de bendición para todos